La ruta 40. On the road. Si no eres argentino, seguramente no hayas crecido con el sueño de recorrerla. Probablemente ni si quiera sepas de qué ruta estoy hablando. Claramente no tiene la misma publicidad que la archiconocida ruta 66 en Estados Unidos. Pero no es que tenga poco que envidiarle es que, desde mi punto de vista, le da alrededor de 5000 vueltas. 5224 vueltas exactamente, 5224 kilómetros que separan Cabo Vírgenes de la Quiaca.

Como todos sabéis, yo no nací en Argentina y tampoco crecí con el sueño de recorrer esta ruta. Pero sí se ha convertido en un sueño viajero con el paso de los años. Aún no he podido transitar toda su longitud pero, “de a poquito”, le voy arañando kilómetros.
Escribo este post la misma semana que cumplo 40 años. La ruta 40. Mi 40 cumpleaños. Le voy arañando kilómetros a la carretera y a la vida. Voy conociendo lugares que te dejan sin respiración. Pero, sobre todo, me voy cruzando con gente maravillosa. Voy encontrándome con algunos soñadores entre los locos…
“Porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas y entonces se ve estallar una luz azul y todo el mundo suelta un ‘¡Ahhh!”
Jack Kerouac, On the road
Recorrido de la ruta 40
La ruta 40 acompaña a los Andes y recorre Argentina de Sur a Norte pasando por las provincias de Santa Cruz, Chubut, Río Negro, Neuquén, Mendoza, San Juan, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Salta y Jujuy.

Atraviesa 21 parques nacionales, 18 importantes ríos, conecta 27 pasos cordilleranos y trepa a casi 5000 msm en Salta, convirtiéndola en la ruta más alta de América, y también la más alta del mundo fuera de los Himalayas. Por su kilometraje, es la ruta más larga de América y una de las más extensas del mundo.
Índice
- Patagonia Sur
- Patagonia Norte
- Mendoza
- Catamarca
- Valles calchaquíes, Cachi y Cafayate
- San Antonio de los Cobres y la Polvorilla
- La Quiaca
Patagonia Sur y la ruta 40
La ruta 40 nace en Cabo Vírgenes, al sur de río Gallegos, y recorre el sur de la Patagonia atravesando lugares icónicos como el Chaltén y el Perito Moreno. Os conté mucho más de ellos en post anteriores pero que siempre merecen una nueva foto.

La Patagonia y sus lugares para perderse, lugares para disfrutar y respirar azul clarito. Me voy encontrando personas maravillosas por la ruta, otras llegan hasta ella conmigo.
“Porque al final no recordarás el tiempo que pasaste en la oficina o arreglando tu casa. Ve y escala esa maldita montaña”
Jack Kerouac
Bariloche
Bariloche. La capital del chocolate y de los viajes de egresados. Una mezcla de turismo de montaña y fiesta. Brasileños que vienen a esquiar y recién recibidos llenan la ciudad. Discotecas, pubs y ropa de trekking. Y en el medio, nosotras.

Cerro Catedral
Dicen que las vistas desde este cerro son impresionantes. Nosotras pillamos un día con mucha niebla. No fue el único en este viaje, pero nada podía quitarnos la sonrisa de la cara. Y es que viajar es lo único que cuesta dinero, pero te hace más rico.

Cerro Tronador
El cerro tronador. Una nueva aventura. No podíamos perdernos las famosas noches de Bariloche. Más nos costó levantarnos para llegar a tiempo a nuestro autobús…

Parque nacional Nahuel Huapi
Las nubes nos dejan disfrutar de este especáculo de la naturaleza. Lago y montañas se funden en uno. La navegación por el Nahuel Huapi es una gozada.

Los mapuches, pobladores originarios de la región, dieron a la isla más importante el nombre Nahuel Huapi, que significa en mapudungun “isla del jaguar”. Se presume que este nombre alude al tótem de una familia puelche que pobló la zona o quizás a la comparación de aquellos indígenas con los yaguaretés por su audacia y valentía.
Villa la Angostura y la región de los lagos
La villa se vacía en invierno. Todo está cerrado. Somos las únicas en Puerto Manzano y en el autobús nocturno.
Parque Nacional Arrayanes
Antes de iniciar el trekking vemos que llueve un poco. ¿Nos arriesgamos a hacer el trekking? Llevamos chubasquero. Malo será. Las vistas merecen la pena pero acabamos caladas hasta los huesos.

Caladas hasta los huesos llegamos hasta la casa del guarda y de allí nos vamos directas a por un chocolate caliente acompañados de los únicos locos que, como nosotras, han optado por caminar por la península de Quetrihué hoy. Una vez recuperado un poco de temperatura, regresamos en barco hasta la villa.

Ruta de los 7 lagos
La ruta de los 7 lagos es un recorrido escénico de aproximadamente 110 kilómetros en la Patagonia Argentina, que une Villa La Angostura con San Martín de los Andes. Merece la pena abandonar la ruta 40 por un día para atravesar el Parque Nacional Lanín y el Parque Nacional Nahuel Huapi.

El nombre de esta ruta panorámica se debe a los siete lagos que se pueden admirar en el camino: Lácar, Machónico, Falkner, Villarino, Escondido, Correntoso y Espejo.

San Martín de los Andes
San Martín de los Andes fue nuestra puerta de entrada a la Patagonia. Un mes de caminos y montañas esperaba a nuestras botas. Y justo una semana antes, ¡oh no! Un esguince de tobillo.

Con mi esguince era imposible hacer ninguno de los trekkings de San Martín. Si la vida te da limones, haz limonada. ¡Hagámoslo a caballo!
Sobre la grupa de nuestras monturas, viajamos al pasado. Recordamos aquellos pioneros que cruzaban la cordillera por primera vez. Me vienen a la mente las aventuras y crónicas de Ada Maria Elflein.

Algún microinfarto nos costó recorrer esos caminos y precipicios a lomos de nuestros caballos, pero la aventura mereció la pena. Disfrutamos de paisajes y momentos para el recuerdo.
No es héroe quien no siente el miedo, sino el que lo vence. Nosotras lo sentimos y lo vencimos; pero declinamos el honor de que nos consideren heroínas.
Ada M. Elflein. Impresiones de viajes
Mendoza
Mendoza. Tierra de viñedos y montañas. El Aconcagua, el cordón del Plata y la calle Arístides.

Unos días geniales que me permitieron llegar allá donde mis ojos lo soñaron. Más gente con ganas de todo al mismo tiempo.

Catamarca
Catamarca. Uno de los lugares que más me ha sorprendido en los últimos años. Una semana mágica. Una semana que me permitió conocer mucha gente de la que le gustaba a Kerouac. A mucha gente loca por vivir.

Tierra de salares y volcanes. Aquí la ruta 40 atraviesa las ruinas del Shincal, Londres, Belén o los castillos de Villa Vil.

Cerca de Belén también nos encontramos con el mítico kilómetro 4040 de la ruta 40. Nadie se resiste a dejar su sticker sobre la señalización.

San Juan y la Rioja
Aún no he pasado por estas dos provincias argentinas. ¡Os las debo!
Salta y los valles Calchaquíes
La ruta 40 atraviesa apenas una esquinita de la provincia de Salta. Estoy en deuda con la provincia salteña. Me quedan muchos rincones que visitar, pero me ha permitido vivir momentos mágicos. Momentos irrepetibles. A Salta le debo conocer gente que ya forma parte de mi. De Yacuy a Payogasta. De Cachi a la capital. El norte es diferente. El norte te atrapa. Siempre vuelvo donde fui feliz.
Cafayate
Cafayate. Capital de los vinos de altura. Una vez más los stickers se acumulan en la señalización de la Ruta 40. Una vez más me cruzo con gente que hace cosas espectaculares, como Fernanda en el centro de las Pluralidades.

Quebrada de las Conchas
A 15km de Cafayate, por la ruta 68, nos encontramos con esta impresionante reserva natural y sus mágicas formaciones rocosas.

Payogasta
La constelación Payogasta. Mirada calchaquí. Una reunión de amigos locos por la fotografía. Más cohetes amarillos para la colección.
Cachi
La ruta 40 cruza por el medio del pueblo de Cachi. Un pueblo detenido en el tiempo en el que Lourdes y Mauro me cuentan sobre su trabajo en el molino de especias.

San Antonio de los Cobres y la Polvorilla
La ruta nacional 40 alcanza los 5000m de altitud en el Abra del Acay, cerca de San Antonio de los cobres y el viaducto de la Polvorilla.
La Quiaca
Bienvenidos a la Quiaca. El punto más al norte de la ruta 40. El final de unos días geniales acompañando a Nico y Juan en su proyecto de caminos del norte en foco. Una gallega en Iruya. La Quiaca fue el paso fronterizo que elegí para cruzar hacia mi aventura por Bolivia.

La ruta 66
¡Seguimos on the road! Después de escribir este artículo no puedo evitar continuar hablándoos de la carretera. Os cuento un poco de nuestro periplo por la Costa Oeste de EEUU y la ruta 66 en el próximo post.

¡Hasta aquí el post de hoy! ¡Nos vemos on the road!
Y a los locos, ¡que nos dejen soñar!

Tengo tanto que agradecer. Las historias que ya he escrito y las que quedan por contar. Un invierno de recuerdos, un verano por vivir. La gente que me quiere, los que me hacen sonreír. Son ellos los que me hacen ver que no es la canción, es con quien la cantas. Que no es la fiesta, sino con quien bailas. Que no son los ojos, es la forma de mirar. Que no es lo bueno que te pasa, sino con quien lo compartes. Que si estoy con los míos no hace falta nada más.
Félis y Javi Robles. A los locos

Me emociona siempre un poco más leerte! Pienso en tus palabras y me da una mezcla de orgullo y alegría y justo ahí me llueven imágenes de tus acciones y de lo que dejás cada vez que estás por este lado del mundo y justo ahí me quedo sin palabras!
Ceci-.
Muchas gracias Ceci! A mi si que me emocionan siempre tus palabras. Me miras con demasiados buenos ojos…
Un lujo habernos cruzado en esta aventura. Un lujo contar con tu dedicación y, sobre todo, con tu amistad!