Tres días en Samarcanda. La joya de la ruta de la seda. Caminar por sus calles te transporta a la época de caravanas y comerciantes. A la época de seda y riquezas. A las páginas de Ibn Battuta y Marco Polo.

Llegamos a la ciudad de Samarcanda, que es una de las más grandes y bellas del mundo. Sus jardines rodean la ciudad por todos los lados, y sus mercados son amplios y están llenos de gentes de todas las tierras. Es una ciudad noble, de excelente construcción, y abundan en ella los sabios y los piadosos. A pesar de los estragos de las guerras, sigue siendo una de las maravillas del país de los turcos
Al-Rihla. Ibn Batutta, 1333
Índice
- Un poco de historia: la ruta de la seda
- Antes de ir
- Comer y dormir en Samarcanda
- Itinerario por Samarcanda en tres días
- ¿Qué ver en Samarcanda?
- Fábrica de papel de Konigil
- Shahrisabz
- Artesanos uzbekos
- Otras ciudades de Uzbekistán
La joya de la ruta de la seda
Es imposible hablar de la Ruta de la seda y no imaginarse a los ricos comerciantes medievales con sus cabezas envueltas en turbantes, atravesando desiertos y montañas. De Xian a Constantinopla, esta ruta permitía la llegada a las cortes europeas de la apreciada seda, cuya elaboración era un secreto que solo los chinos conocían.

La Ruta de la Seda es el nombre con que es conocida desde el siglo XIX una extensa red de rutas comerciales terrestres y marítimas, abiertas por China desde al menos el siglo I a. C., que conectaban la mayor parte del continente asiático con el Mediterráneo europeo y con la costa oriental africana. Además de seda, por estas rutas se comerciaba con piedras preciosas, especias, porcelana y un largo etcétera.
La domesticación de caballos y camellos, así como un periodo de clima húmedo, hace unos 3.000 años, permitió abrir las primeras rutas parciales que servirían de base a la Ruta de la Seda. Por esa razón en China se la conoce como la “Ruta de los Caballos”.
Marco Polo, Ibn Batutta y la UNESCO
En el siglo XIII, el explorador veneciano Marco Polo se convirtió en uno de los primeros europeos que recorrieron la ruta hasta China, y sus relatos, documentados en Los viajes de Marco Polo, abrieron los ojos occidentales a algunas de las costumbres del Lejano Oriente. No fue el primero en traer de vuelta esas historias, pero fue sin duda el más leído. Los viajes de Marco Polo, conocido también como El libro de las maravillas, es el título con el que suele traducirse al español este libro de viajes, conocido en italiano como Il Milione (El millón).
Ibn Battuta, viajero marroquí musulmán, pasó por el actual Oriente Medio y recorrió toda la Ruta de la Seda entre 1325-1354. Muhámmad ibn Battuta inició su viaje con intención de realizar el hajj o peregrinación a La Meca. Partió de Tánger, según su crónica en 1325, «solo, sin compañero con cuya amistad solazarme ni caravana a la que adherirme». Tenía entonces 22 años. No volvería hasta 24 años más tarde, después de haber recorrido más de 120 000 kilómetros, de un extremo a otro del mundo musulmán y fuera de él.

En junio de 2014, la Unesco eligió un tramo de la Ruta de la Seda como Patrimonio de la Humanidad con la denominación Rutas de la Seda: red viaria de la ruta del corredor Chang’an-Tian-shan. Se trata de un tramo de cinco mil kilómetros de la gran red viaria de las Rutas de la Seda que va desde la zona central de China hasta la región de Zhetysu, situada en el Asia Central.
Antes de ir
Os cuento todas las recomendaciones sobre cuándo ir y como moverse en Uzbekistán en mi post: Uzbekistán en 2 semanas. Nosotras volamos a Taskent y desde allí nos movimos en tren hacia Samarcanda. El tren es un medio de transporte muy cómodo en este país.
Comer y dormir en Samarcanda
Nos alojamos en el Hotel Registán Zargaron. Una casa familiar muy bien ubicada y con un buen desayuno. Recomendable.
Encontramos esta maravillosa terraza en el Minaret frente a la mezquita Bibi-Khanym con buenos precios, deliciosa comida y unas magníficas vistas.

Os cuento más sobre la comida tradicional uzbeka en mi post sobre Uzbekistán en 2 semanas. Para comer Plov podéis dirigiros al mercado (3€ el plato) o al plov center de Samarcanda.

Un poco más alejada del centro se encuentra la zona de Pub Street, repleta de cervecerías donde pedir buena pivo. Nosotras estuvimos en el Bochka Pivo Bar, cerca de la fábrica de cerveza Pulsar. Un lugar muy tranquilo y con buen ambiente.

Itinerario recomendado para tres días en Samarcanda
Día 1
Inicia el día visitando la plaza del Registán. Tras ello, dirígete hacia la mezquita Bibi-Khanym. Después de comer visita el Bazar Siab (Chorsu Market). Para acabar el día, acude a la Necrópolis de los Santos o Shakhi-Zinda, es interesante recorrerla de día y también al atardecer.
Día 2
Dedica el segundo día a viajar hasta Sharhrisabz y conocer su casco histórico. De camino haz una parada en Konigil para descubrir su fábrica de papel tradicional. También puedes combinarlo con una visita al mercado de Urgut. Al regresar a Samarcanda, aprovecha para disfrutar de la plaza del Registán iluminada.
Día 3
Dedica la última mañana en Samarcanda al Mausoleo de Gur-e-Amir y el Observatorio de Ulugh Beg. Por la tarde, visita la mezquita de Hazrat Khiz y disfruta del atardecer en sus alrededores.
¿Qué ver en Samarcanda?
Plaza Registán
Es la plaza más importante de Samarcanda. Incluye tres madrazas (Ulugh Beg, Sher-Dor y Tilla-Kari). Dedícale tiempo para admirarla tanto de día como de noche, cuando se ilumina.
“Registán” significa literalmente “lugar de arena” en persa. Originalmente era un espacio abierto en el centro de la ciudad, usado para mercados, reuniones públicas y proclamaciones.

La plaza está rodeada por tres madrazas principales, cada una con su propia historia y estilo. Cada madraza tenía un propósito educativo diferente: Ulugh Beg para astronomía y ciencias, Sher-Dor para estudios religiosos, Tilla-Kari también como mezquita.

Los azulejos azules representan el cielo y la divinidad, mientras que los motivos geométricos muestran el arte matemático islámico. Algunos mosaicos incluyen inscripciones coránicas y patrones florales muy detallados.
En la segunda planta de la Madrasa Ulugbek hay una cafetería. Sube para contemplar las vistas desde sus balcones.
Mausoleo Gur-e-Amir
Visita el impresionante mausoleo de Tamerlán, con una decoración rica tanto en el exterior como en el interior.

Bazar Siab o Chorsu market
Explora el bazar para sumergirte en la vida local, encontrar souvenirs y probar la gastronomía de la zona. Se encuentra cerca de la Mezquita Bibi Khanum.

Mezquita Bibi-Khanym
Contempla la mezquita construida en honor a la esposa de Tamerlán, una de las más grandes del mundo islámico. Representa la ambición de Tamerlán de convertir a Samarcanda en la capital más majestuosa de su imperio.

Complejo Shahi Zinda
Dedica varias horas a este complejo de mausoleos, conocido como la necrópolis De los Santos o la “tumba del rey viviente” y un importante lugar de peregrinación.

La última hora de la tarde es una buena hora para visitarlo y disfrutar de sus colores con la luz del sol y también de la tranquilidad al caer la noche.


Observatorio de Ulugh beg
Descubre los restos de lo que fue uno de los observatorios astronómicos más importantes del mundo medieval. Ulugh Beg y sus astrónomos calcularon la posición de más de 1,000 estrellas con gran precisión. Elaboraron un catálogo astronómico que se mantuvo como referencia en Europa y Asia por siglos y mejoraron el cálculo de la precesión de los equinoccios y ajustaron calendarios solares.

Incluía instrumentos astronómicos para medir la posición de los cuerpos celestes y determinar calendarios y eclipses. Tenía observatorios laterales, bibliotecas y salas de estudio, convirtiéndolo en un centro científico y educativo. Su instrumento más famoso es es el gran sextante cilíndrico que mide aproximadamente 40 metros de radio y fue construido en mampostería y ladrillo e incrustado en el suelo para medir ángulos con máxima precisión.

Mezquita Hazrat Khizr
La Mezquita Hazrat Khizr es uno de los templos más antiguos, singulares y espiritualmente significativos de Samarcanda. Aunque suele quedar “a la sombra” de grandes complejos como Registán o Bibi-Khanym, es un lugar cargado de historia, misticismo y vistas espectaculares.

Además de admirar las columnas de madera tallada y el pórtico, obras maestras del artesanado uzbeko, es el lugar perfecto para disfrutar las vistas panorámicas hacia Shakhi-Zinda y toda Samarcanda.


Artesanos uzbekos
Uzbekistán tiene una tradición artesanal impresionante, heredada de siglos de comercio, culturas y rutas como la Ruta de la Seda. Te muestro algunas fotos de los artesanos uzbekos en el post de Uzbekistán a través del espejo.

Fábrica de papel y aceite de Konigil
El papel de Samarcanda tuvo un papel fundamental en la difusión de la ciencia, la literatura y la administración en el mundo islámico medieval. La fábrica de Konigil fue creada para preservar y revitalizar esta tradición casi perdida en el siglo XX.
Papel de Samarcanda
La historia del papel de Samarcanda es una de las más fascinantes de la Ruta de la Seda, porque combina innovación tecnológica, intercambios culturales y un impacto profundo en el desarrollo del mundo islámico y más allá.
El papel fue inventado en China alrededor del 105 d. C., aunque ya existían formas más primitivas antes. Durante siglos, China mantuvo el secreto de su fabricación, lo que le daba una enorme ventaja en producción de libros, administración y comercio.
El punto clave fue la Batalla de Talas (751), entre el Califato Abasí y la Dinastía Tang.
Según la tradición histórica, entre los prisioneros chinos capturados había artesanos del papel. Estos transmitieron su conocimiento a los abasíes y a los habitantes de Samarcanda, que era entonces una de las ciudades más ricas y cosmopolitas de la región. Samarcanda tradujo este conocimiento en industrias locales y pronto se convirtió en un centro productor de papel de altísima calidad.

A diferencia del papel chino, hecho de diferentes materiales vegetales (cáñamo, bambú, etc.), en Samarcanda se comenzó a fabricar sobre todo a partir de fibras de morera, un árbol muy abundante en el valle del Zeravshan. El resultado era un papel resistente, flexible y muy duradero, ideal para libros, manuscritos y documentación administrativa. Gracias a este material más barato y más práctico que el pergamino, hubo un boom cultural con traducciones masivas de textos griegos, persas e indios, desarrollo de bibliotecas enormes y difusión del saber en medicina, matemáticas, astronomía y filosofía.
A través de Al-Ándalus y Sicilia, la técnica del papel llegó a Europa. Las primeras fábricas europeas surgieron en Játiva (España) y Fabriano (Italia).
Fábrica de papel artesanal
La fábrica de papel de Konigil (a veces llamada Meros Paper Mill o Konigil Paper Factory) es un taller artesanal situado en Konigil, una aldea a unos kilómetros de Samarcanda, en Uzbekistán. Es conocida por haber recuperado la técnica tradicional de fabricación del papel de seda de Samarcanda, un material muy valorado en la Ruta de la Seda durante siglos.

Se elabora papel siguiendo técnicas antiguas del siglo VIII, cuando la fabricación de papel se extendió desde China a través de Asia Central. El papel se produce a partir de la moreras, cuyas fibras son muy resistentes y permiten obtener un papel duradero y flexible.
El proceso incluye pelar la corteza de la morera según se ve en la foto, ablandarla en agua, triturarla con mazos accionados por molinos hidráulicos, convertirla en pulpa, formar hojas en tamices y secarlas y pulirlas con piedras o conchas.
En el taller de Konigil se utilizan molinos de agua para accionar mecanismos de trituración y batido de fibras, igual que en la antigüedad.

Los visitantes pueden ver cada etapa del proceso: pelado de corteza, ablandado, triturado, creación de pulpa, formación de hojas, prensado y secado.
Fábrica de aceite
En Konigil también se utiliza la fuerza de los molinos de agua para producir aceite de forma artesanal.


Sharhrisabz
Shahrisabz o Shahr-e Sabz, en persa significa ciudad verde. Su antiguo nombre era Kesh. Desde el año 1993, su centro histótico forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

Para llegar, puedes contratar una de las múltiples excursiones disponibles desde Samarcanda o negociar el precio de ida y vuelta con un taxista. Nosotras contratamos una excursión con una guía de habla española que nos permitió conocer mucho más de la ciudad y de la cultura uzbeka.
El reciente pasado soviético hace que aún haya mezcla de ateísmo y religión musulmana. La mayoría de las mujeres tengan estudios superiores y sus propios trabajos. Además, casi toda la población habla varios idiomas: ruso, árabe, uzbeko y algún otro idioma extranjero.

Las ruinas del palacio Ak-Saray, construido por Temerlán nos dan una idea de la riqueza de la ciudad en aquella época. Amir Temur, más conocido como Temerlán (En persa, Timur el cojo) fue el último gran emperador de Asia Central. Sus logros y su capacidad de engendrar miedo fueron comparables a los del mismísimo Gengis Khan.

Después de visitar Samarcanda, la visita de Sharhrisabz se queda un poco “coja” para mi gusto. Si tienes que recortar días de tu recorrido por Uzbekistán, ignorar esta ciudad puede ser una buena opción.
Hasta aquí el post de hoy. ¡Nos leemos en breve!
